Etiquetas
Alessandro di Pietro, asco, civilización y barbarie, consejos de limpieza, lavandería, mancha moral, manchas, pureza y peligro, reputación, substancias químicas
… son las desesperadas palabras de Lady Macbeth al tratar de borrar de sus manos las imaginarias manchas de sangre que ha dejado en su conciencia el asesinato del rey de Escocia para arrebatarle el trono. Sus manos están limpias, pero en su sueño delirante, ella intenta eliminar la marca del crimen. En su Macbeth, William Shakespeare sabía que nuestro mundo separa lo “limpio” de lo “sucio”, y que todo lo “sucio” es peligroso, sea en la materia de lo real, sea en la substancia inasible de lo moral o espiritual.
por Lilliana Ramos Collado
Se trate de la mancha de vino tinto en la alfombra, de la mancha moral sobre nuestra reputación, o de la mancha de sangre en las manos asesinas, hemos declarado una guerra a muerte contra ese estigma demasiado rico en significados. Nos dice la antropóloga Mary Douglas, en su clásico Purity and Danger, que perseguir el sucio, decorar, ordenar la casa, no expresan ansiedad contra la enfermedad, sino una búsqueda de orden que pretende alejarnos de conductas peligrosas sintomáticas de una mala ciudadanía. Lo estudia William Ian Miller en su Anatomía del asco: se trata de un sentimiento moral y social que declara nuestra aversión hacia lo amenazante.
Por eso he leído y usado con fascinación el manual de Alessandro di Pietro titulado El libro de las manchas. Guía completa y eficaz para su limpieza. Di Pietro, un prominente ambientalista enfocado en la cotidianidad como campo de batalla, recopila aquí los consejos sobre ecología del hogar que ha ofrecido en su programa ¡Ojo al malgasto! en la televisora italiana Rai Uno. Sigue leyendo